El Gomero, también conocido como Ficus elastica, es una de esas plantas que nunca pierde vigencia. Con sus hojas grandes, brillantes y de un verde intenso (o con tonos únicos en sus variedades más nuevas), aporta presencia y elegancia a cualquier espacio. En esta nota te contamos sobre sus variedades, cómo cuidarlo y por qué puede transformarse en un verdadero árbol en tu hogar.
🌿 Variedades más comunes
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Gomero clásico o tradicional
Hojas verdes oscuras, brillantes, muy resistente y fácil de cuidar.
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Gomero ‘Cabernet’ (o ‘Burgundy’)
Hojas de color verde profundo que con la luz se ven casi bordó o vino tinto. Una variedad elegante y moderna.
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Gomero variegado (‘Tineke’ o ‘Variegata’)
Follaje con bordes crema y toques rosados. Es el más decorativo y da un toque luminoso en ambientes claros.
🌳 De maceta a árbol
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En interiores puede crecer hasta 2–3 metros en maceta, con un porte robusto.
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En exteriores, plantado en tierra, puede llegar a transformarse en un árbol de más de 10 metros.
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Con podas suaves podés darle forma y controlar su altura en interiores.
🌞 Cuidados básicos
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Luz: prefiere luz brillante indirecta; el variegado necesita más luminosidad para mantener sus colores.
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Riego: moderado, dejar secar la capa superior del sustrato entre riegos. Evitar exceso de agua.
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Ambiente: se adapta a interiores con buena luz; lejos de corrientes frías o calefactores directos.
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Mantenimiento: limpiar las hojas con un paño húmedo para mantenerlas brillantes y permitir que respiren.
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Tip: girar la maceta cada tanto para que crezca recto y equilibrado.